Las estaciones de tren son mucho más que simples puntos de tránsito donde los viajeros suben o bajan de un tren. Son puertas de entrada a las ciudades, cruces culturales y escenarios donde se desarrollan innumerables historias. Desde majestuosos edificios históricos hasta obras maestras arquitectónicas de vanguardia, el mundo alberga estaciones tan impresionantes que transforman el viaje en una experiencia artística.
En este artículo presentamos una selección de las 10 estaciones de tren más hermosas del mundo, explorando su historia, su diseño y el encanto único de cada una. Comencemos la cuenta regresiva desde el puesto n.º 10.

10. São Bento (Portugal)


La estación São Bento, en Oporto, cautiva con su extraordinaria colección de más de 20.000 azulejos. Estos murales en azul y blanco representan batallas históricas y escenas cotidianas, convirtiendo la estación en un auténtico museo viviente. La serenidad de sus tonos azules y su ambiente solemne dejan una profunda impresión en los visitantes.

9. Estación de Kanazawa (Japón)


La estación de Kanazawa fusiona el diseño contemporáneo con la estética tradicional japonesa. Su icónica Puerta Tsuzumi, inspirada en los palillos utilizados en las artes escénicas tradicionales, da la bienvenida con una elegante estructura de madera. El “Motenashi Dome”, de vidrio y acero, ofrece una luz suave y simboliza el espíritu hospitalario de la ciudad.

8. Estación Liège-Guillemins (Bélgica)


Diseñada por el célebre arquitecto Santiago Calatrava, esta estación es una visión futurista hecha realidad. Sus curvas blancas, amplios arcos y un enorme techo de vidrio cambian de carácter según la luz del día, creando un espacio a la vez monumental y ligero, como la puerta de entrada a una metrópolis futurista.

7. Komsomólskaya (Rusia, Moscú)


Conocida como un “palacio subterráneo”, la estación Komsomólskaya del metro de Moscú es un estallido de opulencia. Mosaicos dorados, enormes lámparas de araña y relieves barrocos adornan el espacio, que se siente más como un salón imperial que como una estación. Es uno de los ejemplos más espléndidos de arte en el transporte público.

6. Union Station de Los Ángeles (Estados Unidos)


Una mezcla elegante de estilo colonial español y Art Déco define esta icónica estación angelina. Techos altos, azulejos cálidos y mobiliario vintage crean una atmósfera cinematográfica. En medio del dinamismo urbano, la estación se mantiene como un monumento sereno con un fuerte carácter histórico.

5. Chhatrapati Shivaji Maharaj Terminus (India)


Antiguamente llamada Victoria Terminus, esta estación declarada Patrimonio de la Humanidad es una obra maestra que combina la arquitectura victoriana gótica con influencias indo-sarracenas. Sus elaboradas tallas, torres puntiagudas y vitrales coloridos forman un espectáculo visual. De noche, su fachada iluminada se vuelve aún más mágica.

4. St Pancras International (Reino Unido)


Con su fachada neogótica de ladrillo rojo, St Pancras es uno de los edificios más emblemáticos de Londres. En su interior destaca una enorme nave ferroviaria coronada por un techo arqueado, una maravilla de la ingeniería del siglo XIX. La estación combina con elegancia el esplendor histórico con la funcionalidad moderna.

3. Antwerpen-Centraal (Bélgica)


Apodada la “Catedral del ferrocarril”, Antwerpen-Centraal es impresionante por su grandeza. Su vestíbulo central de mármol, la cúpula majestuosa y las amplias escaleras evocan la magnificencia de un palacio. La integración armoniosa entre la estructura histórica y la terminal moderna la convierte en una joya arquitectónica de clase mundial.

2. Grand Central Terminal (Estados Unidos, Nueva York)


Símbolo de la ciudad de Nueva York, Grand Central deslumbra con su techo celeste decorado con constelaciones y su majestuoso salón principal inundado de luz natural. Más allá de su belleza arquitectónica, funciona como un centro cultural muy querido por neoyorquinos y visitantes.

1. Estación de Tokio (Japón)


En lo más alto del ranking se encuentra la Estación de Tokio, orgullo de la arquitectura japonesa. Su bellísima fachada de ladrillo rojo en el lado Marunouchi, restaurada con estilo neobarroco, es admirada en todo el mundo. Tanto de día como de noche, la armonía entre su historia y su funcionalidad moderna la convierte en una de las estaciones más impresionantes del planeta.

Conclusión

Las estaciones de tren más hermosas del mundo son mucho más que infraestructuras de transporte: son expresiones de identidad cultural, excelencia ingenieril y visión artística. Cada estación de esta lista cuenta su propia historia y refleja el espíritu de su ciudad.
La próxima vez que viajes, tómate un momento para apreciar la estación en sí. Quizás descubras que el viaje comienza mucho antes de que el tren parta.